Ya conocemos que el aborto inducido es aquella interrupción del embarazo de forma voluntaria que puede ser realizada mediante proceso farmacológico o quirúrgico. Aunque el concepto esté claro, se siguen teniendo muchas dudas sobre cómo se realiza un aborto inducido. En Clínica el Mar queremos despejar esta cuestión y contar más acerca de los procedimientos utilizados para ello.

El aborto puede realizarse de dos formas:

• Aborto farmacológico: Este método se utiliza, generalmente, hasta la semana 9 o 10 de embarazo. Consiste en la administración de dos medicamentos:
  • Mifepristona: Bloquea la hormona progesterona, que es esencial para el mantenimiento del embarazo.
  • Misoprostol: Se toma unas horas después de la mifepristona y provoca contracciones uterinas para expulsar el contenido del útero.

El aborto farmacológico puede realizarse en clínicas especializadas o en casa, dependiendo del caso y siempre bajo supervisión médica.

• Aborto quirúrgico: Se utiliza cuando el embarazo está más avanzado (entre las semanas 10 y 14). Existen dos técnicas principales:
  • Aspiración o succión: Es el método más común hasta las 14 semanas. Se utiliza una pequeña bomba para aspirar el contenido del útero.
  • Dilatación y evacuación: Se utiliza en embarazos más avanzados y consiste en dilatar el cuello del útero para extraer el feto mediante herramientas quirúrgicas.

Según Top Doctors, el método farmacológico se debe realizar sólo en las primeras semanas de gestación. Los fármacos que se administran a la embarazada pueden ser por vía oral, inyectándose en la bolsa amniótica, en la vagina o por vía intravenosa. Sin embargo, el método quirúrgico en nuestro país se suele realizar mediante aspiración y hasta las 12 semanas. Sólo cuando esta técnica no es factible se procede a realizar la dilatación.

Es importante que antes de la realización de un aborto inducido se realicen ciertas pruebas para determinar así el método que utilizar. Las pruebas que se realizan son una ecografía obstétrica y ginecológica, análisis de sangre, análisis del historial clínico general y ginecológico, y una entrevista psicológica o psiquiátrica.

Abortos provocados

Un aborto provocado es otra forma de denominar a lo que conocemos como aborto inducido o voluntario. Se utilizan los mismos métodos mencionados anteriormente y se siguen los mismos procedimientos. Es primordial conocer todo sobre los abortos provocados, sobre por qué se realizan hasta los cuidados tras la intervención. 

La decisión que toma la mujer embarazada de interrumpir de forma voluntaria la gestación suele estar relacionada con factores sociales, económicos, sexuales o problemas que afecten al feto. Algunas de las situaciones que dan lugar a la realización de este procedimiento son:

• Fallos en los métodos anticonceptivos.
• Violencia sexual.
• La mujer no quiere tener al hijo en ese momento.
• Relaciones inestables o abandonos.
• Demasiados hijos.
• Malformaciones en el feto.
• Salud física o mental de la embarazada.
• Problemas económicos.

Una vez la paciente está decidida a abortar, siempre hay que tener en cuenta las semanas de gestación en las que se encuentra el feto. En España existen unos plazos para poder abortar de forma libre. Hasta la semana 14 se puede realizar libremente y después se tienen en cuenta los problemas del feto o la madre para que se pueda realizar el aborto. En nuestro artículo Todo sobre los abortos, explicamos los plazos permitidos en nuestro país. 

Además, los abortos provocados tienen unos requisitos y siguen un protocolo claro como por ejemplo que la embarazada sea informada previamente del procedimiento. También está obligada a firmar un consentimiento informado. El proceso puede realizarse tanto por la sanidad pública como por la privada, teniendo en cuenta que la pública es más lenta y que en la privada se puede pagar un coste que puede estar subvencionado.

Tras la intervención, su médico le aconsejará una serie de instrucciones para asegurar una correcta recuperación. Algunas recomendaciones suelen ser la ingesta de antibióticos para prevenir la infección y de antiinflamatorios para aliviar el dolor de los cólicos u otras molestias. También se aconseja descansar y no tener relaciones sexuales en al menos una semana. La primera vez que se mantengan es recomendable usar como método anticonceptivo el preservativo para prevenir infecciones. 
Si necesitas más información sobre los abortos provados ponte en contacto con nosotros y resolveremos todas tus dudas.